Para los nuevos emprendedores, uno de los mayores miedos es el fracaso. Y es que, además de la personalidad y las cualidades necesarias para hacerlo, hay que tener en cuenta otros factores que pueden ayudar al éxito o al fracaso.
Son muchos los errores cometidos a lo largo de la historia por diversos emprendedores. Sin embargo, hoy os hablaremos de los más comunes.
10 ERRORES COMUNES COMETIDOS POR EMPRENDEDORES
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SER DEMASIADO OPTIMISTA
Es cierto que una de las cualidades de los emprendedores debe ser el optimismo, ya que si fueran pesimistas nadie comenzaría en esta aventura. Sin embargo, serlo en exceso puede hacerte sobreestimar los ingresos e infravalorar los gastos. Hay que ser realista e intentar ver las cosas tal y como son.
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NO SABER TRABAJAR EN EQUIPO
Puede que al principio no haga falta nadie al frente del negocio excepto tú. Sin embargo, muchas veces toca ampliar el personal y no saber delegar las tareas ni trabajar en equipo es un gran problema para el negocio. Como solución a este problema, existen un montón de cursos para trabajar y mejorar esta cualidad de manera sencilla; te dejamos unas técnicas aquí.
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NO CONOCER EL SECTOR
Si tu producto es muy bueno pero no conoces el sector, estás perdido. Es mucho mejor invertir tiempo y/o dinero en buenos estudios de mercado que nos vayan a ayudar a tomar buenas decisiones presentes y futuras.
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NO DEDICAR SUFICIENTE TIEMPO AL NEGOCIO
Olvídate de las 40h semanales establecidas en un contrato habitual; los emprendedores tienen que tener total dedicación al negocio, sobre todo al inicio cuando todo es nuevo. No te recomendamos trabajar en dos sitios a la vez, el tiempo es limitado.
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INTENTAR CRECER MUY RÁPIDO
Que el objetivo de los emprendedores sea crecer lo entendemos, pero crear una empresa fuerte y consolidada supone tiempo y va despacio. Nunca sabes si en algún momento te va a tocar retroceder, así qué, resiste a la tentación.
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CREER QUE UN BUEN PRODUCTO SE VENDE SOLO
Muy ligado al optimismo va la confianza en los proprios productos. Por muy buenos que sean, si el cliente no los conoce, no los necesita o no sabe para qué sirven, poco podemos hacer. Lo que está claro es que los productos no se venden solos, siempre vamos a necesitar de algo para ello.
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NO PENSAR EN EL CLIENTE
Los clientes contentos son una de las mejores cosas que le puede pasar a tu negocio. Por eso, es importante no olvidarse de él una vez compran, ya que hay que acompañarles en todo el proceso de compra, lo cual incluye una atención posterior también. De manera inevitable vas a tener que gestionar consultas, quejas o devoluciones. Las redes sociales te ayudarán en este proceso de fidelización.
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NO PONERSE EN EL LUGAR DEL INVERSOR
Emprender requiere dinero, y si no lo tienes, lo más común es buscar inversores que aporten el capital necesario a cambio de la cesión de una parte del negocio. Las relaciones que se crean entre emprendedores e inversores no suelen ser fáciles ya que los primeros piensan en términos de producto y los segundos en términos de rentabilidad, cosa que a veces está reñida. Llevarlo de la mejor manera posible hará que se evite un fracaso.
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NO SER CAPAZ DE ADAPTARSE
Emprender supone enfrentarse a muchos cambios, ya que el mercado y los consumidores cambian constantemente (modas, hábitos sociales…). Hay que saber adaptarse y adelantarse a estos cambios antes de que supongan un imprevisto negativo en la empresa.
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NO EMPEZAR NUNCA
Este, sin duda, es el mayor error de todos. Nunca podrás emprender si no empiezas nunca a hacerlo. De nada sirven los estudios, la investigación y el tiempo invertido si luego no lleva a nada. No dejes tampoco que tu proyecto se quede obsoleto por el miedo al fracaso.
Y tú, conociendo estos errores, ¿te atreves ya a emprender?
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